Los futbolistas de la selección Colombia de mayores, como la mayoría de los deportistas de nuestro país, demostraron ser superiores, no solo a sus directivos, sino a sus directores técnicos. Para la muestra, el botón del juego España Colombia, el cual perdió la selección nacional 0x1.
Antes del compromiso, el técnico Hernán Darío Gómez, manifestó su temor por enfrentarse a los campeones del mundo, llegando incluso a presagiar una goleada para su equipo; se atrevió a decir, palabras más, palabras menos, que era mejor programa irse al cine que estar en ese partido.
Las palabras de “bolillo” Gómez motivaron todo tipo de comentarios y reacciones, desde todos los estamentos de la sociedad colombiana; a tal punto que una destacada cadena radial invitó a sus oyentes a llamar a su estación, para que sugirieran una película, al técnico nacional.
Se escucharon todo tipo de sugerencias; La guerra de las galaxias, Duro de matar, Donde las águilas se atreven, Todo sobre mi madre, y muchas más. Pero a nadie se le ocurrió sugerirle, al técnico, ver y oír el discurso de Kenji Orito Díaz, cuando fue exaltado por la JCI Colombia, como uno de los jóvenes destacados en el 2010. Orito, dijo, en uno de los apartes de su discurso, que a los colombianos nos gusta que nos tengan lástima y nos vivimos repitiendo que somos unos incapaces. “Bolillo” Gómez, ha corroborado las afirmaciones del colombo japonés, al manifestar pánico porque debía jugar ante el campeón del mundo.
Afortunadamente, para el fútbol colombiano, los jugadores tuvieron otro pensamiento y salieron a jugarle a los ibéricos, como lo harían ante un equipo común y corriente. Fueron agresivos, pisaron el área, burlaron los defensores de la roja y en cinco ocasiones estuvieron a punto de anotar. En defensa, fueron serios y, aunque sobre el final llegó el gol hispano, salieron bien librados.
No se sabe que pensaba el técnico, o si hizo charquito, o no, en el banco en que estaba sentado. Lo que sí sabemos es que vimos un juego entretenido, con dos equipos que, en la cancha, demostraron igualdad de condiciones; claro, ellos eran los campeones del mundo y estaban obligados, jugando de locales, a la victoria que a la postre les llegó. Pero Colombia no fue inferior, ni al rival, ni al compromiso.
El fútbol, como toda actividad de la vida, necesita, señor Gómez, actitud ganadora. Claro que era el número 1 del Ranking mundial, contra el 50, pero eso no importó, porque se jugó con entereza, con seriedad, con amor por la camiseta y por el país que representan. España, siempre juega a ganar; por eso está en el grupo de los primermundistas del fútbol. El técnico Gómez juega a que no lo goleen, por eso somos tercermundistas, hasta en el fútbol.
La Colombia que se enfrentó a España, hizo renacer la confianza en el equipo y la ilusión de clasificar a Brasil 2014.
Fue mejor ver el futbol, que ir al cine; gracias a Dios no seguimos el consejo del técnico y nos quedamos viendo un entretenido partido.
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